viernes, 29 de octubre de 2010

Quienes me visitan al anochecer


Cada día despierto con ese sabor a esperanza que me dejan los sueños, con rostros conocidos pero a la vez tan lejanos.


El tiempo ha hecho lo suyo, y me hace recrear episodios desde mi subconsciente hasta el consciente, para recordarme que ellos aún siguen ahí, que los días no nos han separado más allá de los kilómetros y las responsabilidades.


El amor y la necesidad han traspasado las caricaturas nocturnas, aquellos sueños sin hilo conductor, cobran sentido cuando abro los ojos y unos las historias, cuando mis oídos piden escuchar esas voces, cuando mi piel pide un abrazo, cuando necesito simplemente reír con ellos.


¿Qué dirán ellos de la distancia?, ¿qué pensarán del paso de los años?, ¿habrán cambiado tanto las cosas como para no necesitarnos?, ¿cuándo volveremos a encontrarnos?


Mientras me cuestiono, mis dedos bailan al son de una canción, y escriben a aquellos rostros que me han visitado estos días, que concurren mis noches para remecer mis soledades y saber que cuento con ellos.

1 comentario:

AleMamá dijo...

Escribes muy bien, pero ¡muy bien!

Los sueños, son todo un tema, y las personas pasados unos 5 años, si no renovamos nuevos lazos o cosas compartidas, ya se van haciendo otras, igual que "nosotros los de entonces ya no somos los mismos" (Neruda, poema 20)

besos, te sigo leyendo.....

Somos