domingo, 10 de marzo de 2013

Me rompieron el alma.

Esa mañana la música iba pegada a mis oídos,
pero sin previo aviso sentí un maullido o quizás dos,
miré al suelo y un gatito de menos de dos meses me pedía ayuda 
con los ojos completamente cerrados por la conjuntivitis.
Lo llamé y no sabía de dónde venía ese sonido,
chocó y vaciló, estaba completamente perdido.
Se me llenaron los ojos de lágrimas,
qué ganas de quedarme con ellas y cuidarlos,
sanarlos y no dejarlos ir.
Pensé, "¿cómo mierda hay gente tan inhumana?,
¿tan falta de sentido?, ¿tan pobre de corazón?"
Entiendo cuando escucho a personas que no le gustan los animales,
que no simpatizan con su cuidado,
y por lo mismo no tienen mascotas.
Pero cuando hay personas que tienen animales
y no son capaces de hacer una tenencia responsable
es cuando se me parte el alma en dos
y sufro con cada animal enfermo y abandonado en l
a calle.

Esos dos gatitos me rompieron el alma,
a las 8 de la mañana me quebraron completamente
y hasta hoy no he podido dejar de pensar en ellos.
Mi ayuda fue mínima, 
los pasé por una reja para que no los atropellaran,
mientras las personas me miraban con curiosidad
pero sin ninguna preocupación.
Sólo espero que se encuentren con un amante de los animales
y sean felices en un hogar lleno de amor.
Yo, mientras cuido y protejo a los míos.

No hay comentarios:

Somos