El sentirse amado no tiene precio
Sentirse acompañado es incomparable
Reconocer la magia que tiene un llamado telefónico
para cambiar planes y convertir lágrimas y dolor
en sonrisas y esperanza
Tener la certeza de compañeros de camino
inquebrantables, que no se marchan porque sí,
que hay vida y dolor compartido
¡Gracias infinitas!
"Camino por Madrid en tu compañía,
mi mano en tu cintura,
copiando a tu mano en la cintura mía,
a paso lento como bostezando.."
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