sábado, 9 de febrero de 2013

=/

Estos días lejos tuve la oportunidad de abstraerme,
de mirar desde lejos,
de sentarme en silencio a mirar el mar,
de ser testigo de la felicidad por la paternidad,
de recordar el sabor de la adolescencia con mis primas,
de pensarme y pensarnos en estos años.

Últimamente he reprochado la maternidad,
no por miedo a congelarme,
sino porque es un acto tan grande,
es un paso al costado de por vida 
y dejar que el hijo que saldrá de mis entrañas se llene de amor 
y viva de la felicidad que la vida lo deje probar.
Porque eso significa encontrar a un compañero
que no sólo sea el padre de mis hijos,
sino que él signifique el amor en plenitud,
y que formemos una familia para la posteridad.
Ayer fui testigo de cómo la negativa por parte de la ciencia
les impedía ser padres a mis primos,
pero la fe y el amor inmenso pudo más
y recibiremos a Santiago o Isabel en Septiembre.
¡Qué bondadoso ha sido Dios!

 Arranqué de Santiago porque no daba una más,
porque me cuesta tanto aceptar lo que está sucediendo,
porque me rindo cada vez que veo a mi papá así,
porque siento que ya no tengo energías para seguir luchando,
¿de dónde las saco?
Él necio como una puerta se está dejando vencer,
mientras intento luchar con mi impaciencia y sus errores,
me tapo los oídos al escuchar una y otra vez lo que ya han repetido,
me cubro con mis frazadas intentando desaparecer y que todo sea una pesadilla,
me refugio en mis lágrimas a escondidas porque no puedo más,
mientras a todos les muestro mi cara más fuerte.
Quiero seguir arrancando porque la depresión se está devorando a mi papá
y no sé cómo traerlo de vuelta, lo desconozco completamente.
Quiero arrancar porque no quiero seguir viviendo esto,
porque tengo tanta pena,
porque no quiero ni pensar en cómo seguirá avanzando esto,
porque esta mierda ya me está comiendo el alma.

Estas lágrimas seguirán guardadas en estas cuatro paredes,
no puedo permitir llorar frente a los demás
mientras mi mamá es la capitana más fuerte de esta tripulación.
Si pudiera detener todo esto y hacer volver a mi papá de hace años,
impenetrable, trabajador inagotable, que inspiraba taaanto respeto y autoridad.
Déjame buscar las energías que perdí para retomar esta lucha,
déjame rezar una vez más por tu salud,
déjame recordarte lo que eras,
déjame darte mil razones para seguir viviendo,
déjame decirte que todo lo que somos es por tí,
déjame decirte que seguimos siendo una familia,
déjame curarme este dolor en silencio para volver a abrazarte.

Toda la paciencia que logré cultivar se me agotó.
Todas las energías de la juventud se me acabaron.
Quiero dejar de oir por un día
Quiero dejar de sentir este dolor
Quiero recibir buenas noticias
Quiero abstraerme
Quiero transcender
Quiero volver a dormir bien
Quiero refugiarme
=/Quiero olvidar
 


No hay comentarios:

Somos