Meses complicados, en que he querido escapar, en que los colores no están, esta nube gris me opaca completamente. Ayer con esas mismas lágrimas de aquél verano, traté de limpiarme, intenté sanar heridas, intenté respirar, y no sentir ese nudo en mi garganta, se me hace imposible hablar sin sollosos, e imaginar que alguna vez este dolor de cabeza no estaba, que restas horas sin dormir, eran horas dormidas, que estás ojeras no estaban tan marcadas, y que el dormir no era un priviliegio, sino más bien era algo más en la vida. Mi cuerpo está cansado, este dolor persiste y se ha convertido en mi compañero, ya es parte de mí. Este dolor es crónico. Pido a gritos un respiro, unos días para dormir, para decir con todas sus letras "no tengo nada que hacer" ese día llegará, lo sé, pero cada vez la espera se hace más pesada, y necesito una distracción, a mis amigos, salir a bailar, compartir, abrazar, jugar sin remordimientos. El descansar se me hace lejano, y hasta me siento culpable en pensar en él con todo lo que me esperan estas putas semanas. Apíadate de mí..
Lo entendiste mal. :)*
Publicar un comentario
No hay comentarios:
Publicar un comentario